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Además de, soluciones claras y sencillas para un agua limpia y cristalina. Hay muchas cosas que pueden afectar a la calidad del agua de tu acuario. Si estás experimentando un problema, no te preocupes, les ocurre incluso a los propietarios de peces más experimentados. A continuación, te presentamos tres de los problemas más comunes y cómo puedes corregirlos fácilmente.
Sobrealimentación:
La comida no consumida se descompone y puede enturbiar el agua. Alimenta a tus peces dos o tres veces al día, pero no más de lo que puedan comer en uno o dos minutos.
Sobrepoblación:
Cuando hay demasiados peces en la pecera, el exceso de residuos desprende amoníaco y nitritos, que también pueden enturbiar el agua. Recomendamos un pez tropical (maduro) de una pulgada por cada galón de agua y un pez dorado (maduro) de una pulgada por cada tres galones. Por lo tanto, un tanque de 10 galones debería tener sólo 10 peces tropicales de una pulgada cada uno, o un pez dorado de 3 pulgadas.
Síndrome del tanque nuevo:
Un propietario de peces sin experiencia puede no darse cuenta de que tiene que preparar el filtro de su nuevo acuario para manejar los desechos de los peces mediante un proceso llamado “ciclado”. Un filtro ineficaz crea niveles elevados de amoníaco, que pueden perjudicar a los peces y provocar un agua turbia. Por ello, cuando instales tu acuario por primera vez, asegúrate de acondicionarlo y ciclarlo inmediatamente con SafeStart®.
La turbiedad suele solucionarse con una o varias de estas medidas:
El agua verde es el resultado de un exceso de algas, que puede ser causado por:
Pasos sencillos para resolver el problema del agua verde:
Un mal olor suele ser un signo de exceso de residuos, y normalmente de exceso de comida.
Aquí hay algunos pasos que puedes tomar para respirar mejor:
Pruebas completas para comprobar los niveles del agua del acuario.
Limpia el agua de acuarios de agua dulce, aclarando el agua turbia o brumosa.
Elimina las algas y evita que regresen en acuarios con o sin plantas.